Andres Cadavid, sería clave en rastreo de salvoconductos

Andrés Felipe Cadavid acaba de regresar al fútbol colombiano para jugar en Independiente Medellín, tras un paso de seis meses en Colón, de Argentina. El zaguero es ahora una pieza clave en las investigaciones sobre presuntas irregularidades en la Cuarta Brigada, de Medellín, aunque según el abogado del jugador, Mauricio Beltrán, él no está vinculado al proceso.

Cadavid nació en Medellín el 28 de diciembre de 1985. Empezó a jugar en la B, en Atlético Bello, y luego fue al Huila, donde fue dejado libre en 2008. Por un tiempo, abandonó el fútbol profesional y estudió tres semestres de administración de empresas.

El técnico Orlando Restrepo lo vio en un partido de fútbol aficionado y lo convenció de regresar a jugar: lo llevó a Patriotas de Boyacá, que por entonces estaba en la B. Al año siguiente pasó al América de Cali, donde vivió un episodio complicado en su vida deportiva: en un partido frente a Millonarios, le rompió la tibia y el peroné al uruguayo José Luis Tancredi. Recibió tres meses de sanción.

Tuvo pasos por Deportivo Cali, San Luis de México y Envigado antes de llegar a Millonarios, donde vivió los mejores momentos de su carrera, entre ellos, el título de Liga en la temporada 2017-II. Paralelamente con su labor como futbolista, Cadavid estudió comunicación audiovisual en el Politécnico Jaime Isaza Cadavid. Este año fue su grado.

Cadavid, además de su pasión por el fútbol, es coleccionista de armas. Desde niño tuvo una colección de pistolas de agua. En 2015, cuando jugaba en Millonarios, un coronel lo ayudó a entrar a un club de tiro y posteriormente montó un polígono, El Viejo Oeste, en Medellín, en sociedad con el empresario Alexander Giraldo Santa, al que la indagación liga con otro polígono en Bogotá: Milipol Ltda.

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