La Dirección de Tránsito de Bucaramanga actualmente desarrolla un estudio técnico, para cumplir el fallo emitido por el Juzgado 15 Administrativo de Bucaramanga. Este ordena implementar restricciones específicas a la circulación de motocicletas en la ciudad.
Este fallo, producto de un proceso por desacato, exige a las autoridades locales adoptar medidas concretas para controlar y reducir el transporte ilegal, principalmente en zonas críticas del municipio. Las restricciones impuestas por el juez incluyen tres condiciones clave:
- Prohibición del parrillero hombre mayor de 18 años en ciertos sectores de la ciudad.
- Condición de que el conductor de la motocicleta sea el propietario registrado del vehículo.
- Restricción de circulación de motocicletas en zonas específicas.
La Dirección de Tránsito trabaja de manera rigurosa y técnica para definir cómo implementar estas medidas sin afectar negativamente la movilidad cotidiana de los ciudadanos. Para ello, se cuenta con un equipo técnico de 17 profesionales que actualmente realizan aforos vehiculares y estudios de movilidad en los principales corredores viales. ¿El objetivo? Identificar el impacto que estas restricciones podrían generar en el flujo vehicular.
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“Este fallo no es una iniciativa propia de la Dirección de Tránsito, sino una orden judicial que debemos acatar. Lo que estamos haciendo es construir un modelo técnico que nos permita cumplir la orden, pero protegiendo al mismo tiempo la movilidad diaria de los ciudadanos”, explicó Jhair Andrés Manrique, director de Tránsito de Bucaramanga.
Como parte del proceso, ya se solicitó al juzgado una prórroga de un mes adicional —hasta el próximo 3 de junio de 2025— para finalizar el estudio. Además, para presentar una propuesta completa y fundamentada que indique cómo se aplicarán las restricciones solicitadas.
Enfoque del estudio técnico
El enfoque del equipo técnico busca que las restricciones se concentren en atacar el transporte ilegal, sin afectar la circulación de ciudadanos que hacen uso regular y legítimo de sus motocicletas. Por ejemplo, se contempla aplicar restricciones puntuales en horas pico y en zonas críticas como la carrera 33, donde operan terminales informales. Esto permitiría descongestionar el sector sin impactar otras vías principales que ofrecen rutas alternas.
“Debemos tener claro que este es un fallo judicial de obligatorio cumplimiento. Lo que estamos trabajando es el cómo, con criterios técnicos, para que las medidas se enfoquen en el objetivo real del juez: frenar el transporte ilegal, sin perjudicar la movilidad general”, añadió el director.
La Dirección de Tránsito reitera su compromiso con la legalidad, el orden vial y el bienestar de la ciudadanía. Se continuará informando de manera oportuna los avances del estudio y las decisiones que de él se deriven.