Médicos salvan vida de gemelos de 32 semanas de gestación

Hasta el tradicional hospital Materno infantil de Bogotá, llegó Erika con 32 semanas de gestación, esta joven mujer de nacionalidad venezolana llevaba en su vientre a dos bebés que estaban a punto de morir.

Según cuenta la joven madre, sus dos hijos venían en mal estado y ella tenía miedo de que fallecieran. “Me explicaron que los bebés venían muy malitos presentaban un soplo en el corazón cada uno. Tenían que madurar los pulmones y extraerle los líquidos. Además, venían mal de los riñones, pues no estaban expulsando orina por sí solos. Yo estaba muy enferma”, dijo Erika.

Por su parte, Eduardo Gálvez Cuitiva, Neonatólogo de la Subred Centro Oriente, explicó que este icónico lugar de Bogotá tiene una amplia experiencia en el manejo de bebés que no han completado su ciclo de gestación o que son prematuros y además en cuanto a la atención de partos y en el manejo de paciente crítico neonatal es uno de los mejores. “Recibimos un caso muy complicado, los fetos estaban muy hinchados y en riesgo de morir. El nacimiento fue por vía abdominal a sus 32 semanas de gestación, con pesos elevados debido a su edema y a su hinchazón. Requirieron un trabajo interdisciplinario del equipo de Neonatología de la institución, con permanentes drenajes de pulmón, abdomen e intervención del equipo de cuidados intensivos. Estuvieron al borde de la muerte”, manifestó Gálvez.

Además, señaló que el Instituto Materno Infantil de Bogotá, el cual pertenece a la Subred Centro Oriente, se ha convertido en un gran ejemplo en el Distrito en hacerle homenaje a la vida, pues es actualmente la institución en donde más bebés nacen en Colombia.

Hoy, gracias a la grandiosa labor que realizaron los médicos y enfermeras de este importante lugar de la ciudad, Erika está feliz de ser la mamá de Hank y James que, aunque nacieron en una condición muy crítica están a salvo.