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La Vicepresidente y Canciller hace un llamado a los Colombianos para que no se dejen engañar pretendiendo cruzar la frontera a México o Estados Unidos Ilegalmente

“Las mafias de migrantes y de tráfico de personas los abusan, los violan, separan a los niños de sus familias, los dejan tirados en el desierto. Por eso es que hemos tenido el caso de tantos Latinoamericanos muertos. Colombia que nunca había tenido muchos migrantes ilegales, el año pasado en agosto, por ejemplo, se supo la noticia de Marcela Pineda oriunda de Tunja, quien por reencontrarse con su esposo que había logrado viajar legalmente en el 2019, resolvió cruzar ilegalmente con sus dos hijos menores por el desierto de Yuma Arizona, falleciendo ella y su hija de once años, o el caso de Jonathan Egidio Betancourt Arenas, un colombiano de 34 años quien se ahogó en el río Bravo el pasado 14 de abril. No hay ninguna justificación para correr esos riesgos queriendo buscar un futuro mejor, nunca hay un futuro mejor exponiendo la vida propia y la de sus familiares”.

– De acuerdo con el reporte entregado por la agencia para la Protección Aduanera y Fronteriza de EEUU, durante el mes de marzo se registraron 221.303 mil detenciones de personas que intentaron llegar al EE.UU. por las fronteras de México, de manera ilegal. Es la cifra más alta registrada desde hace dos décadas.

– La falsa percepción de la política migratoria de Biden ha dado pie al fenómeno migratorio, sin precedentes, que se está dando en América Latina.

– Haití es el país con los peores números (36 vuelos de deportaciones en mayo y 16 en abril); sigue Guatemala (32 vuelos en marzo y 27 en abril).

– Los pasos fronterizos más peligrosos son Eagleapass en Texas, El Paso en Texas, Yuma en Arizona, Eloy en Arizona y Laredo en Texas. En México están Tijuana, Mexicali, Matamoros, Piedras Negras y Reynosa.

– Solamente en el mes de mayo se registraron un total de 135 vuelos de deportaciones; este número subió un 18 % respecto a abril, pero aumentó en 131 % respecto a mayo del año pasado.

Con el cambio de gobierno en Estados Unidos hacia uno, aparentemente, más tolerante y compasivo, la migración hacia el país, desde distintas naciones de América Latina y El Caribe se ha volcado a proporciones preocupantes. Según datos ofrecidos por las autoridades migratorias del país norteamericano, solo durante el mes de marzo se registraron 221.303 mil detenciones de personas que intentaron llegar a EE. UU. por las fronteras de México, de manera ilegal. Es la cifra más alta registrada desde hace dos décadas, que implicó un aumento del 24 % en comparación con el mismo mes del año pasado.

Históricamente los corredores fronterizos entre Estados Unidos y México han sido de los más concurridos del mundo. Esta situación empeoró por la percepción que tienen los migrantes sobre la flexibilización en las políticas migratorias de Estados Unidos. Si bien, los nacionales de Haití, Nicaragua, México, Honduras, Guatemala, Venezuela y Cuba (beneficiados por la eliminación de visas de Nicaragua) lideran la cantidad de personas que intentan ingresar ilegalmente al suelo norteamericano, la falsa percepción de facilidad que se está difundiendo ha dado pie a que cada vez más colombianos intenten la hazaña.

La situación, dada por un mensaje equivocado sobre lo sencillo que resulta ingresar a Estados Unidos por frontera terrestre y sin visa americana, resulta en los números más elevados de migrantes de toda la región. Solamente en el mes de mayo se registraron un total de 135 vuelos de deportaciones; este número subió un 18 % respecto a abril, aumentando en 131 % respecto a mayo del año pasado. Haití es el país con los peores números (36 vuelos de deportaciones en mayo y 27 en abril); sigue Guatemala (32 vuelos en marzo y 27 en abril). Seguido por Honduras con 30 vuelos, Colombia con 21 vuelos y El Salvador con 12.

En este fenómeno de la región, la cantidad de colombianos deportados de Estados Unidos en el primer cuatrimestre del año ha aumentado exponencialmente, en comparación con el mismo período del año pasado. Cifras registradas por el Consulado General de Colombia en Houston dan fe de la preocupante situación: el año pasado, entre enero y mayo, se dieron un total de 330 deportaciones; este año la cifra va por 8483. “La situación nos preocupa por el riesgo que corren nuestros connacionales en manos de los coyotes mexicanos y la mafia del tráfico de personas. Hemos solicitado a la Embajada de Estados Unidos facilitar la visa de nuestros estudiantes, de los turistas colombianos dentro de un espíritu de corresponsabilidad, pero también de la cooperación que debe haber entre dos países amigos para que los connacionales no sufran ningún tipo de discriminación ni en la atención, ni en el otorgamiento de visa, porque son muchos los colombianos que viajan a ese país por razones de turismo o porque tienen familiares. Hago un llamado a los connacionales para que consideren la realidad de la situación y los peligros que implica llegar ilegalmente a Estados Unidos”, advirtió la Vicepresidente Ramírez.

La cónsul general encargada del Consulado de Colombia en Houston, Liliana Rosales Serge, confirma la preocupación. Las deportaciones son un indicador de la cantidad de personas que están intentando llegar a Estados Unidos de manera irregular y cuya decisión implica un arsenal de historias que en buen porcentaje terminan en tragedia.

Las autoridades de todos los países desconocen la cantidad de personas asesinadas, ahogadas, fallecidas por causas naturales producto de las condiciones ambientales, violadas o desaparecidas, pues a los consulados llegan contados casos de familiares que buscan ayuda para repatriar los cadáveres a sus países de origen o solicitar ayuda cuando ya no pueden controlar la situación.

Asegura la cónsul Rosales, a quien le compete una de las jurisdicciones más afectadas por la migración irregular, que con el Título 42 del Código de Estados Unidos de marzo de 2020, que tuvo vigencia hasta el 23 de mayo, el país permite una deportación expresa y sin derecho a solicitar asilo por parte de migrantes que entren a su frontera. Luego del 23 de mayo, con la derogación de este Título, los migrantes indocumentados que lleguen a la frontera sur estadounidense serán investigados con base en el Título 8, que es la norma previa y común por la que EE. UU. realiza deportaciones desde su territorio. Los migrantes que no tengan una base legal para quedarse en el país serán expulsados pese a la eliminación del Título 42.

“Las personas que se están entregando en la frontera aplican a la figura de Asilo Político, que siempre ha existido y para la cual se debe tener un caso bien argumentado de miedo creíble en el país de origen. Gran porcentaje de las personas que ingresan utilizan esta figura con desconocimiento de lo que significa, cuáles son los requisitos y cómo es el proceso. Desconociendo que esto no es indicativo de que pueden ingresar, tener estatus legal y residir en Estados Unidos. La mayoría de las personas que solicitan el asilo pueden permanecer meses detenidos, mientras un Juez de Inmigración decide su situación migratoria, afectándolos emocionalmente pues es el mismo ambiente y trato de cualquier centro de detención”.

Los pasos más conocidos para cruzar hacia Estados Unidos desde México son Eagleapass en Texas/Coahuila en México; El Paso en Texas/Ciudad Juárez en México; Yuma en Arizona; Eloy en Arizona y Laredo en Texas. En México, los pasos más peligrosos están en Tijuana, Mexicali, Matamoros, Piedras Negras y Reynosa. Un reporte de la Guardia Nacional del Ejército de Estados Unidos indica que el paso más peligroso es el de Laredo, pues se trata de una zona controlada por los carteles mexicanos de drogas. “Ahí obligan a los migrantes a transportar cocaína en su paso por la frontera. Si alguna persona se niega, los carteles proceden a asesinarlo”.

Explica la cónsul encargada de Colombia en Houston que otro paso altamente peligroso es en Eaglepass, pues las personas deben cruzar nadando. Ahí se ubica el Río Bravo, conocido por sus arenas movedizas, corrientes fuertes y porque está infestado de cocodrilos. Sobre Arizona, los reportes están orientados hacia abusos y maltrato físico por parte de los conocidos coyotes y de los mismos oficiales de Inmigración.

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