La feria se mueve y se siente al ritmo de la bicicleta y del Parche de las Flores

La Feria de las Flores es el máximo evento de Medellín para el disfrute de propios y visitantes.  Como parte de los eventos programados, se destacan los concursos La Feria al Ritmo de la Bicicleta y El Parche de las Flores, en los que la gente derrocha imaginación para divertirse y expresar su alegría.

“La Feria de las Flores es un símbolo que representa la cultura de la ciudad y esa capacidad de los paisas y demás culturas que viven aquí para florecer ante las adversidades”.

Con este breve y concluyente concepto define a los paisas Silvana Lucía Mendoza Morales, una joven odontóloga de 22 años, quien llegó a estas latitudes hace unos seis años y que confirma su deseo de vivir aquí más tiempo, por lo bien que se siente.

Ha ido conociendo el comportamiento y las actitudes de los medellinenses y por ello no es ajena a lo que sucede en la ciudad.  Fue así como el año pasado, a raíz de la Feria de las Flores, al enterarse del concurso La Feria al Ritmo de la Bicicleta, no lo pensó dos veces y decidió participar en ella, aprovechando la emoción que sentía porque hacía poco había adquirido su propia cicla.

Sin más miramientos, se inscribió en el concurso, motivada por el apoyo que este promulgaba hacia la sostenibilidad ambiental y porque quería dejar un mensaje de que la bicicleta es de los medios de transporte más amigables con el medio ambiente; porque mejora la salud tanto física como mental y porque es una opción muy buena para moverse en la ciudad. Con el concurso, encontró un complemento perfecto.

Un pavo real en bicicleta

Silvana se inventó un disfraz de pavo real, con su cabeza, su plumaje y su cola, hecho en cartón y otros elementos ecológicos, y le quedó tan bien hecho, que se llevó el primer puesto en su categoría.

“Me demoré como tres semanas consiguiendo los materiales, las piezas, el encaje, la pintura y demás elementos del disfraz”, señala.

Ella, a pesar de no ser de aquí, vive encantada con la ciudad y con la feria.

“A la gente le diría que se anime a participar en estos concursos; es una experiencia única, se conoce a muchas personas trabajando en estos proyectos. Es la satisfacción de esforzarse por hacer algo lindo y, además, se disfruta el premio”, expresa.

Esta habitante del barrio Robledo-La Pilarica tiene claro que acá se quedará por un buen tiempo, “porque hay oportunidades para todos, de tipo laboral y de estudio, y porque desde que llegué, estoy encantada con la ciudad”, concluye.

La Calle de la Alegría

Javier Rodas tiene 64 años, vive en el barrio Campoamor y es un líder destacado entre su comunidad, a la que siempre motiva a participar en diferentes actividades para fomentar la unión y la camaradería entre los vecinos.

El año pasado, como es costumbre desde hace mucho tiempo y con ocasión de la feria, su cuadra se engalanó para participar en el concurso El Parche de las Flores, en el que los balcones, los frentes de las casas y el vecindario en general, lucieron sus mejores adornos para competir en este evento y poner bonito al barrio.

La Calle de la Alegría es el nombre de su cuadra, bien arborizada, de unos 200 metros de largo, por otros 30 de ancho y es reconocida ya en diferentes ámbitos de la ciudad, en la que Javier y sus vecinos, hombres, mujeres, jóvenes y niños, desbordan su imaginación y creatividad para hacer ver linda y florecida a Medellín durante estas festividades.

“Esto es un trabajo en equipo hecho con material reciclable. Es una experiencia muy bonita porque fortalecemos todo a nivel de barrio, de cuadra y de ciudad”, manifiesta.

En la decoración participaron 17 familias, luego de varios talleres para aprender el proceso. Allí hay un grupo de matronas que los inician en la forma de hacer las flores y luego ellos se encargan de conseguir los implementos y de hacer el montaje.

La decoración consistió en El Árbol de Todito, al cual le metieron muchas frutas, incluyendo bananos colgados.

“Eso fue una novedad, porque todavía lo miran a ver si las manzanas y las peras que hay ahí son de verdad”, dice sonriendo. Pusieron carretas, silletas, fonda de la alegría; a los frentes de las casas les colocaron arreglos hechos en papel crepé y elaboraron 15 ramos de flores con crepé y fomi: “Eso fue un espectáculo y nosotros nos la gozamos”.

Para él, lo importante es que se generan lazos de unión con los vecinos y se magnifica la fiesta, ya que fueron tan duros los dos años anteriores: “Destaco el fortalecimiento de ciudad, el trabajo en equipo, valorar al vecino y que se toma conciencia de muchas cosas importantes. Esta cuadra es muy unida”.  Y resalta, además, el apoyo incondicional de su vecino y amigo, Juan Carlos Cadavid, a quien considera “un pilar muy importante en todo esto”.

Son reconocidos

Desde el año 2000 han obtenido reconocimientos y premios por su participación en diferentes eventos promovidos por parte de emisoras de radio y noticieros de televisión de la ciudad.

Para él, la Feria de las Flores es un espectáculo a nivel de ciudad y de Colombia, “es un evento que resalta la idiosincrasia del antioqueño y del paisa; aquí viene la gente a vender; necesitamos reactivar la economía y estos eventos”

Y en el 2021, aunque les quedó muy bonita la decoración y disfrutaron de la fiesta y del concurso, no ganaron; pero esto no los desmotiva. “Todos los años seguiremos participando, ganemos o no. Esto lo hacemos de corazón”, puntualiza.

Javier vive tranquilo como jubilado, al lado de su familia; eso sí, esperando las ocasiones especiales para planear, con sus vecinos, la próxima actividad y, que de esta forma, su cuadra -la carrera 54, entre calles 5 y 7, del barrio Campoamor- siga siendo la más alegre de la ciudad.

Los dos concursos

La Feria al Ritmo de la Bicicleta se realizará el 6 de agosto, en Carabobo Norte, entre las 10 de la mañana y las 7 de la noche y en esta, su novena edición, premiará la creatividad de los amantes del ciclismo alrededor de las flores. Se espera la participación de 4.000 ciclistas.

Con El Parche de las Flores, se busca estimular la participación y el trabajo conjunto de los vecinos para decorar sus cuadras con temáticas alrededor de la identidad cultural y la tradición antioqueña. Se escogerán tres propuestas ganadoras de acuerdo con su creatividad y estética.

En los sectores premiados se hará un bingo bailable, se obsequiarán dos lechonas y estímulos como televisores, computadores portátiles, entre otros, además se presentará un grupo musical.  Las postulaciones serán hasta el 6 de agosto.