Fiscalía descubre modelo de estafa en masa que utilizó la fachada de un concesionario para engañar a más de 200 personas con falsas compras y ventas de vehículos

Siete personas fueron judicializadas, entre ellas el señalado articulador del entramado ilegal. Se les atribuye la apropiación de 7.700 millones de pesos.

La Fiscalía General de la Nación identificó a 202 personas que confiaron sus ahorros y vehículos a un concesionario ubicado en el norte de Bogotá, con la intención de adquirir carro. Luego de cerrar el negocio y esperar durante varios meses, nunca recibieron el vehículo esperado, los vendedores desaparecieron, al igual que el automotor y el dinero entregado.

En la imagen se observan cinco personas capturadas, de pie, esposadas y custodiadas por dos agentes del CTI vestidos con uniformes oscuros. Están alineadas frente a un fondo institucional de la Fiscalía General de la Nación. Las personas visten ropa casual y deportiva.

Actividades de policía judicial desplegadas por el Cuerpo Técnico de Investigación (CTI) permitieron detectar y capturar en Bogotá a siete de los presuntos integrantes de este entramado de estafa. Se trata del señalado articulador, Luis Felipe Rodríguez González; y seis de sus señalados colaboradores, Daniela Alejandra Gómez Vargas, Yireth Patricia Avendaño Vásquez, Jonathan Yesid Hernández, Tania Katherine Galeano Gómez, Ángela Julieth Díaz Delgado y Jonathan Ferney Vergara Vergara.

Un fiscal de la Seccional Bogotá imputó a estas personas, de acuerdo con su posible participación en los hechos conocidos, por los delitos de estafa agravada en masa, concierto para delinquir y uso de documento falso. Los cargos no fueron aceptados.

Por disposición de una juez de control de garantías, Rodríguez González deberá cumplir medida de aseguramiento en centro carcelario. Los demás seguirán vinculados a la investigación.

Los elementos materiales probatorios indican que, entre 2019 y 2024, fueron contactados por redes sociales ciudadanos interesados en cambiar de carro. Los convencieron de entregar su vehículo con el supuesto de que les ayudarían a venderlo, y les pidieron un millón de pesos para avanzar en la negociación. Sin embargo, cuando las víctimas solicitaban los recursos o la devolución, no recibían respuesta ni restitución alguna.

Asimismo, se estableció que después de tener en custodia los bienes, los presuntos involucrados en el ilícito los habrían comercializado hasta tres veces con falsas promesas de compraventa, pero no entregaban el automotor.

En el curso de la investigación varios de los vehículos de las personas estafadas fueron recuperados en parqueaderos de Bogotá y Medellín (Antioquia).