Bogotá

Mujer denunció que fue intimidada con una navaja en Transmilenio

Hasta abril pasado, según cifras de Medicina Legal, fueron denunciados en Bogotá 1.282 casos de presuntos delitos sexuales. Si bien son diversos los escenarios en los que se perpetran estos hechos —generalmente al interior del hogar— el transporte público no está exento de la problemática. Muestra de ello es lo que denuncia Luisa Rojas, una joven de 21 años, quien advierte por una nueva modalidad de abuso al interior de los buses de Transmilenio.

Según su relato, este miércoles sobre el mediodía abordó un articulado en la estación de la calle 187 y a su lado, se sentó un sujeto que cargaba costales y talegos. Sin embargo, poco a poco, aprovechando la dimensión de esas pertenencias, el hombre la fue arrinconando hacia la ventana.

Cuenta que llevaba su maleta en las piernas y en un intento por alejarlo —pues ya estaba visiblemente incomoda y el sujeto estaba muy cerca— el hombre desenfundó un arma blanca bajo los costales (buscando que nadie lo notara) y la intimidó. Posteriormente, tocó sus partes íntimas en medio de su indefensión y zozobra.

“Iba para la oficina y tomé un servicio L18, que estaba más o menos desocupado. Me senté hacia el costado derecho de la ventana, en la mitad del bus. Conmigo se subió un señor con costales y talegos, bien vestido. Al principio pensé que estaba encartado, pero luego comenzó a arrinconarme y a tocarme. Justo cuando iba a reaccionar me mostró un cuchillo con el que me punzó las piernas y luego, comenzó a tocar mis partes”, explica la joven.

La mujer alega que, aunque quedó perpleja y desconcertada por lo ocurrido, se atrevió a recriminar al sujeto y alertar a los demás pasajeros. Sin embargo, reclama que pocas personas se solidarizaron y a la altura de la estación Pepe Sierra el supuesto agresor salió del bus como si nada.

“Él se reía y cuando lo increparon dojo que estaba loco”, agrega Luisa, quien en ese momento no alcanzó a perseguir al hombre para alertar de su presunta actuación a los uniformados de la estación. “Lo más insólito es que llamé a un CAI y me dijeron que no podían recibirme la denuncia porque no tenía la cédula, ni el nombre del tipo”.

és de sus redes sociales dijo haber sido víctima de tocamientos al interior de un bus intermunicipal que abordó en el municipio de Mosquera con destino a Bogotá. En su relato, la mujer explicó que, en el sector de El Trébol, un hombre se subió al vehículo y luego de cambiarse de puesto en varias ocasiones, se sentó junto a ella, que estaba en el rincón de la ventana.

Durante el recorrido, la joven se durmió y se despertó luego de sentir las manos del sujeto en sus piernas, quien incluso alcanzó a desabrocharle el pantalón. A manera de amenaza ante una posible reacción, el hombre sacó una navaja, lo que la dejó sin capacidad de reaccionar ante los hechos.

Menu Title