La otra cara de la isla Barú

Los residentes de la isla piden al gobierno que se les reconozca el territorio que han habitado durante tantos años.

Los habitantes de la otra parte de la isla que los turistas no conocen, tienen que compartir sus casas o aguantar que los vecinos le dejen la basura al frente de su casa, esto lo han tenido que vivir durante muchos años desde que el turismo llego a la zona.

Antes los habitantes se dedicaban a la agricultura y la pesca, su vida trascurría entre los manglares, las siembras y el mar; pero luego de muchos años personas llegaron a comprar estas siembras o cultivos a los residentes y con los años lo que era publico como las playas se volvió propiedad privada.

Actualmente no cuentan con colegios para sus hijos, tampoco tienen puesto de salud ni un sitio adecuado para sus emergencias, mucho menos alcantarillado o agua potable un servicio vital, pagan recibos de luz costosísimos sin tener el servicio las 24 horas y sin dejar de lado que no tiene un servicio de recolección de basuras, que por mucho pasa dos veces a la semana a recoger la exuberante basura de la zona.

Por ellos la nueva junta de acción comunal puso una tutela en marcha para exigir los derechos que por comunidad les pertenece, una lucha interminable contra los grupos económicos más grandes del país.

¿En qué va la titulación colectiva tras la tutela interpuesta a la ANT?

–En estos momentos, el trámite de la acción de tutela fue anulado por la Corte Suprema porque en su concepto no se integró y/o vinculó en debida forma a la Asociación Amigos de Cholón en Liquidación, quienes argumentan que pueden ser perjudicados sus títulos de propiedad privada con el trámite de solicitud de titulación colectiva.

Parece que hay una estrategia dilatoria en el caso, y lo único que espera la comunidad negra es que no archiven el caso.

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