Denuncian al Fiscal Luis González por supuestas irregularidades en el caso Pizano
Las investigaciones alrededor de la muerte de Jorge Enrique Pizano, excontroller de la Ruta del Sol, ocurrida en noviembre de 2018, y la de su hijo Alejandro, envenenado con cianuro, siguen teniendo repercusiones. Esta vez, la Red de Veedurías denunció al fiscal delegado para la Seguridad Ciudadana, Luis González, por supuestas irregularidades a la hora de recoger pruebas la finca de los Pizano, entre las cuales está un tarro con cianuro y varios dispositivos móviles.
Este miércoles se conoció que ya el ente investigador asignó al fiscal quinto delegado ante la Corte Suprema de Justicia, quien tendrá el deber de determinar si en este caso hay lugar a abrir una indagación preliminar en su contra, o no. La denuncia de la Red de Veedurías cuestionó el procedimiento realizado en la casa de los Pizano, que llevó a que un juez asegurara que las pruebas son irregulares.
“Lo que hizo la Fiscalía fue invalidar las pruebas”, dijo el presidente de la Red, Pablo Bustos. En este caso, las pruebas halladas fueron presentados ante un juez cinco días después de haber sido recogidas. Por esa razón, un juez de Funza neconfirmó que esos elementos no podrán usarse por la Fiscalía porque no se respetó la cadena de custodia en los tiempos legalmente establecidos para ello, posición que fue acogida por la Procuraduría.
“Es importante, la Procuraduría se opuso al manejo de la prueba, administrada irregularmente por la Fiscalía”, agregó Bustos. La denuncia se presentó por la presunta comisión de los delitos de fraude procesal, prevaricato, encubrimiento y concierto para delinquir.
El exauditor falleció el pasado 8 de noviembre en su lugar de residencia por un infarto, según el dictamen de Medicina Legal. La noticia se conoció días después de que la Fiscalía abrió una investigación para esclarecer las causas de la muerte. A la muerte de Pizano se sumó la de su hijo Alejandro, a quien Medicina Legal dictaminó que en su cuerpo había rastros de cianuro, luego de que ingiriera un sorbo de agua que estaba en una botella que encontró en el estudio de su padre en la finca de Subachoque (Cundinamarca).
