Contaminación plástica: una ciudad asolada por 17,000 toneladas de basura

Malasia se ha convertido en uno de los mayores importadores de plástico del mundo,

eliminando la basura que el resto del mundo no quiere. Pero la pequeña ciudad está

pagando el precio por esto, y ahora está ahogada en 17,000 toneladas de residuos.

Comenzó el verano pasado. Cada noche, después de que el reloj marcaba la

medianoche, Daniel Tay sabía exactamente lo que venía.

Cerraría sus puertas, sellaría sus ventanas y esperaría lo inevitable. Pronto su

habitación se llenaría de un olor acre, como si se quemara goma. Tosiendo, sus

pulmones se apretarían.

En los próximos meses, el extraño olor volvería cada noche, como un reloj, sólo más

tarde descubrió el origen del olor: las fábricas de reciclaje ilegal que quemaban

plástico en secreto.

En ese momento no tenía idea de que en 2017 China había decidido prohibir la

importación de residuos plásticos extranjeros. Solo en ese año, había absorbido siete

millones de toneladas de chatarra plástica y muchos activistas ambientales lo

consideraron una victoria cuando China lo reprimió.

Sin embargo, al no tener a dónde ir, la mayor parte de los residuos de plástico, la

mayoría del Reino Unido, Estados Unidos y Japón, simplemente se fueron a otro lugar

y eso fue a Malasia.