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Cómo Colombia está tratando de prevenir un fraude de desmovilización de las FARC


Cuando la organización paramilitar AUC se desmovilizó entre 2003 y 2006, su desmovilización benefició a numerosos narcotraficantes no afiliados. Las antiguas guerrillas de las FARC desmovilizadas ahora están ayudando a evitar una repetición en su proceso.


La primera alarma sonó cuando el periódico El Tiempo descubrió que un señor del crimen de Bogotá había aparecido incorrectamente en la lista de desmovilización de las FARC y había recibido el título de “gerente de paz”.


Las autoridades inmediatamente recordaron a las autoridades el dudoso proceso de paz del ex presidente Álvaro Uribe y del grupo paramilitar AUC.


La inflación de los combatientes paramilitares es lo que más tarde provocó cargos criminales contra el ex comisionado de paz del país y la sospecha de que los funcionarios de justicia habían aceptado sobornos para promover la impunidad en lugar de la justicia.


Cuando los paramilitares comenzaron las conversaciones de desmovilización en 2002, afirmaron tener entre 8.000 y 9.000 miembros. Al final de su desmovilización, sin embargo, unas 32.000 personas se habían desmovilizado.


Entre los que se beneficiaron de los beneficios judiciales otorgados a los paramilitares se encontraban traficantes no afiliados como “El Tuso”, “El Mellizo” y “Gordolindo”.


El descubrimiento del señor del crimen de Bogotá “Fercho” en la lista de las FARC casi inmediatamente provocó el pánico de las autoridades y los ex guerrilleros.


El Comisionado de Paz, Rodrigo Rivera, dijo que más de 2.800 guerrilleros falsos se habían unido a la desmovilización, alegando que aún se revisaban más de 382 solicitudes sospechosas de desmovilización.


También las FARC, que ahora siguen una carrera legal en política, se han puesto en exceso para verificar los nombres en su lista rendida.


De las 382 solicitudes de desmovilización investigadas, 160 fueron confirmadas como falsas por los ex guerrilleros, dijo a El Espectador el asesor judicial de la comisionada de paz, Monica Cifuentes.


La Administración de Aplicación de Drogas de los Estados Unidos también ha estado verificando si los sospechosos de drogas buscados para extradición no están tratando de usar la desmovilización de las FARC para ser protegidos de la extradición.


Según el periódico El Espectador, se han confirmado a 11.348 miembros de las FARC antes del 14 de septiembre. Otros 350 son investigados por no tener documentos de identificación mientras que otros 287 permanecen “bajo observación”.


El asesor judicial del Comisionado de Paz negó la afirmación de El Tiempo de que los abogados vendían boletos de desmovilización a los convictos.


“Hasta ahora no tenemos ninguna evidencia de que las listas de las FARC estén siendo vendidas”, dijo Cifuentes, cuya oficina continuará tratando de purificar la lista de las FARC para evitar el fraude masivo cometido durante el último proceso de desmovilización.


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